31 de enero de 2010

Luna Llena

Luna llena esta noche, y me atormenta el recuerdo de unas manos que se deslizan.
Luna llena, y toda mi piel se eriza, con ese tacto tan característico, y ya no es suave, no.
Son hilos de pensamiento, se cruzan y entrecruzan, se agarran y se sueltan, siguen avanzando, hacen formas, círculos y cuadrados, y al final la respuesta es siempre la misma.
Sí, piensa, piensa, maquina cerebro mío, sigue girando en torno a imágenes, sigue girando en torno a la luna llena invernal, sigue dando vueltas, y vueltas, y más vueltas, porque es todo lo mismo, y por más que gires, el mundo girará igual.
Son manos que acarician, y se deslizan sobre otra piel que se eriza, otro tacto diferente, también, manos que recorren un camino impensable, unas manos traicioneras, que me engañan, y se esconden de mi, unas manos que no me pertencen, pero son mías, mías, y las siento acabar mis extremidades.
Son unos ojos, otros ojos, dos ojos, que brillan en la oscuridad, que se cierran, se abren, se cierran y se abren, siguiendo el ritmo de un aliento interrumpido. Son ojos que me ven, y me miran, me observan, pero me olvidan, son mis ojos, míos, pero no los siento en mi cara, no los siento en mi cuerpo.
Son palabras, palabras blancas, que me hablan, me piden perdón entre suspiros, y yo se lo concedo, porque son mías, son mis palabras, en boca de nadie, en boca de todos, en el aire, soplando con el viento, entre los granos de la arena, hasta que se las lleve el mar.

26 de enero de 2010

260120101939

"Qué hermosa",
dice,
¡Qué hermosa!
Y sus dedos se resbalan dibujando caminos.

"un paseo de vapor",
dice,
y los cristales empañados
crujen a su paso.

Poco a poco va dibujando,
recortando siluetas,
y da forma al aire, y da forma al agua

La nieve tras los cristales,
y sus estrellas de plata,
"¡Qué hermosa!",
dice,
qué hermosa,
y es el reflejo solo
de su alma.

7 de enero de 2010

Desde Ground Control II

- Tras varios días de reflexión, de pensar, de sacar conclusiones y sopesarlas, finalmente lo he decidido. Nada.
- ¿Nada?
- Exáctamente. Nada. No se hará nada. No al menos bajo mis órdenes.
- Pero, señor, no vamos a tener otra oportunidad para contactar con su nave tan buena como esta.
- Lo sé.
- Pero, ¡Podríamos perderle! ¡Para siempre!
No contestó.
Su subordinado abandonó la sala, resignado, "nada".

Así es. Como si las noches en vela, las largas tardes de interminable café y los dolores de cabeza no hubieran tenido valor alguno.
"Pero sí que lo tienen".
Aunque la conclusión era tan sencilla como "no actuar" o "nada", llegar a ello había sido la auténtica odisea.
"Y además..." Y además el simple hecho de "nada" podía desencadenar suficientes acontecimientos por si solo.
Y la culpabilidad de no intervenir era tan grande como el miedo a dar el paso equivocado.

-Feliz cumpleaños, blog ^_^

6 de enero de 2010

612010 03:37

No puedo dormir.
"¿Por qué?"
-Silencio-
"¿Es porque mis ojos ya no están ahí para observarte dormida? Para cuidar de tu respiración, para ver como tu pecho se mueve acompasadamente bajos las sábanas, para admirar otra vez la calidezde tus ojos cerrados, y esa expresión de inocencia de tu boca."
No.
-Dejó pasar un par de minutos, pensativo-
"Ah, ya sé. Es porque cuando cierras los ojos recuerdas el color de los mios. Recuerdas como brillan bajo la luz del sol, y lo ávidos que se vuelven bajo la luz de la luna, para no perderse ni un instante."
-Sonrió en vista del silencio de su interlocutora-
No, claro que no.
"Entonces, ¿por qué no puedes dormir?"
-Qué pregunta tan difícil-
No puedo dormir porque tengo miedo de que pase el tiempo. Tengo miedo de que mañana sea, efectivamente, otro día. Tengo miedo de que el mundo siga dando vueltas, despertarme, y ver que no ha esperado por mi.
-Había tomado su tiempo para responder, pero, al hacerlo, exhaló un largo y meditado suspiro, para controlar sus propios sentimientos-
"Pero, eso es lo único que los seres humanos siempre podremos tener por seguro. Siempre va a haber un mañana. Mañana siempre va a estar ahí para nosotros, o, al menos, con nosotros. El paso del tiempo es inexorable."
Ya lo sé.
-Fue fría. Silencio otra vez-
"¿Ya no piensas en mi?"
-Inquirió al fin, controlando la amargura de sus palabras-
Eso también me da miedo.
-Reconoció-
"¿El no pensar en mi?"
No.
Tú.

Tú me das miedo también.

3 de enero de 2010

Cuatro flores que eres tú.

Cuatro flores blancas, que huelen a ti, saben a ti, y se parecen a ti, porque al fin y al cabo, eres tú.
Cuatro lirios que quise deshojar, para regalarte su perfume, y su tacto sedoso.
18 dulces pétalos que nadaron hasta ti, y que tú acariciaste con tus yemas mimosas, los besaste, y supiste que aunque fuesen tú, entonces, también eran yo.
De esos cuatro lirios, sobrevivieron dos, que quise cuidar y admirar, encerrados en su cajita de cristal, inundados por un agua tan común, que ni lo merecían.
El momento en que la belleza se vuelve muerte llegó también para los dos solitarios lirios que yo guardé, y sus pétalos marchitos se inclinaron, quizás cansados de llevar a cuestas ese color marrón nuevo y doloroso.

¡Qué irónica es la vida! Y, ciertamente, aún más lo es la muerte, prematura, quizás, o tan sólo inesperada.
Dos lirios, dos, como tú y yo, yacen muertos y abrazados todavía, en mi ventana, y recalentados por el sol.

P.S: Para que te guardes en mi cajita de los recuerdos, al lado de alguna corbata y papeles perfumados y con los bordes quemados.

-Me gusta escribir mientras me baño en agua calentita.

1 de enero de 2010

Tus ojos de vidrio.

Tus ojos de vidrio
cubiertos de una fina capa de hielo
me observan,
así, así,
en silencio,
fríos, opacos,
preguntan a mis respuestas blancas
¿Quién soy?
Mi reflejo en tus cristales, quizás
un algo más,
con vida propia, como independiente.
Casi invisible,
y sin embargo,
soy todo lo que ves
más allá de tus ojos muertos.

- Feliz 2010 a todos.