23 de febrero de 2011

Yo me equivoqué.

Y lo admito.
Yo apreté ese gran botón rojo que decía "no apretar". Quizás no leí, quizás no procesé, quizás no quise comprender.
Yo no sólo dejé que todo volase por los aires, sino que detoné con mis propias manos la explosión.
Yo amé el caos, besé sus labios, y dejé que arrasara el mundo conocido.
Yo adoré la destrucción, y levanté un altar en su honor entre los escombros.
Yo me equivoqué, joder. Y mira el resultado.

18 de febrero de 2011

Just wondering.

Si esto sobrevive tiempo (quiero decir, mucho, mucho tiempo), ¿Qué narices voy a pensar cuando me reencuentre con él? ¿Voy a acordarme de cómo me sentía o en qué pensaba cuando escribía (por poco que haya escrito por aquí)?

Es algo que me pregunto a menudo. Bueno, en realidad, es probable que tenga un problema con ello. 
Acostumbro a acumular tonterías pensando este tipo de cosas. 
"Voy a guardar estos apuntes, y cuando algún día, los vuelva a ver, recordaré como me sentí y como era vivir en  mi misma durante mi primer año de carrera"
"Voy a guardar esta tontería que he escrito en un papel y dentro de unos meses, me preguntaré en qué contexto pude jamás escribir tal cosa"
"Voy a guardar esto que aleatoriamente me ha dado alguien de mi entorno. ¿Recordaré quién me lo regaló? ¿Por qué? ¿Cuándo? ¿Recordaré porqué narices lo he guardado?"

Y esto me pasa al menos un par de veces por semana. He venido a escribirlo porque lo estaba pensando mientras escribía en mi agenda. Sí, ahora me he acostumbrado a usar una agenda, porque últimamente olvido cosas, con más frecuencia que antes, a corto plazo (creo que esto tiene que ver con mi humor, últimamente no es muy bueno y me cuesta retener esas cosas) y porque he pensado que si consigo escribir un poco de cada día, o escribir qué cosas importantes ocurrieron en mi vida durante este año, algún día, cuando me vuelva a encontrar la agenda, podré recordarlo todo.

Supongo que siempre he sido muy reticente a olvidar el pasado, y ha terminado derivando en una pequeña manía de intentar grabar en algún medio que vaya a sobrevivir conmigo todo lo que me trae o bien muy buenos recuerdos, o bien me ayuda a evocar una cierta época de mi vida. Por lo que oigo y veo, es bastante común, pero querría señalar como me sorprende a veces el hecho de que inconscientemente asocie a una cierta etapa de mi vida un cierto olor. Incluso podría hablar de "manera de oler las cosas". Es bastante deprimente. Deprimente en el sentido en que a veces cojo un objeto, y la manera en que me llega el olor, de repente, aunque no sabría decir cuándo llegó el cambio, es totalmente diferente a antes. Y eso me llena de nostalgia. Algo así como "ojalá pudiera volver a oler esto como lo olía antes" (obviamente, el olor como tal no es lo que me preocupa, pero creo que se entiende a lo que me refiero).

En fin, solo quería dejarlo escrito en algún lado, ya sabéis, para encontrármelo dentro de años y recordar lo mucho que me cuesta permitir que el pasado se aleje y mi obsesión consecuente por plasmarlo todo de algún modo, aunque francamente, acabo por pensar que esta nostalgia casi permanente es inherente a mi persona, así que dudo sinceramente que esta pequeña confesión me sirva de utilidad algún día.

14 de febrero de 2011

Going adrift

Once upon a time
I was the greatest sailor all over
the wild oceans
and I used to chase beautiful mermaids
that I used to call -oh, yes, I called them-
'dreams'.

Here and there,
steering my grand ship,
reaching shores,
those I'll never see again,
and wandering through unknown seas
I got to understand my own self
as any of you won't ever expect.

But now this old seaman is
wasting this time of his looking after a good Scotch
and he is -still-
remembering those things,
little precious things,
that could have been
but never were.

11 de febrero de 2011

Unos cuantos cambios.

Pues básicamente lo que dice el título: he hecho unos cuantos cambios. Llevaba ya un tiempo dándole vueltas al poco espacio para el texto de las entradas y finalmente esta semana estuve buscando qué podía hacerle. Lo dejé para el fin de semana que volvía a casita y tenía mi sobremesa, lo que implica más movilidad y, sobre todo, una pantalla más grande para ver mejor la dimensión global de los cambios, y ¡aquí está!

He tenido que rehacer el tamaño y unas cuantas cosillas de la imagen de cabecera, cambié la plantilla, le puse un poco más de color al blog (poco a poco me voy deshaciendo del blanco) y hasta he cambiado la fuente.

/entrada de relleno.

8 de febrero de 2011

Métrica: el ritmo. Segunda parte.

¡Buenas noches! Esta es la segunda parte de este post que trata sobre métrica.

Ahora que hemos visto los diferentes pies métricos, creo conveniente destacar que por lo que he visto en las clases en la facultad, lo habitual es clasificar sencillamente en dos grupos: versos yámbicos, cuyo acento axial cae en sílaba par y versos trocaicos, en dónde el acento axial está en sílaba impar.

Vamos a ver entonces la constitución rítmica de los versos, diferentes tipos de acentos:

- El acento axial: Es el más importante del verso. Este acento es obligatorio y necesario, siempre lo vamos a encontrar. Se trata del último acento de un verso. En la métrica española recae en la penúltima sílaba métrica del verso, por las siguiente razones*: si un verso acaba en palabra paroxítona, el último acento estará en la penúltima sílaba de esta; si acaba en palabra oxítona, como sabemos, se añade una sílaba métrica, así que la última acentuada será la penúltima y si acaba en palabra proparoxítona se elimina una sílaba métrica, así que nuevamente el último acento del verso estará en la penúltima sílaba métrica. Este acento determina si el verso es yámbico o trocaico, recayendo sobre sílaba par para los yámbicos, e impar para los trocaicos. (Tened en cuenta que las sílabas se cuentan desde la izquierda).

- El acento rítmico: Este acento está en comunión con el acento axial, en un verso yámbico, los acentos rítmicos caen en sílaba par, y si el verso es trocaico, en sílaba impar.

- El acento extrarrítmico: Este acento es el contrario al rítmico, es decir, si estamos ante un verso yámbico, el acento extrarrítmico es aquel que caiga en sílaba impar, y si estamos ante un verso trocaico, el acento extrarrítmico estará en sílaba par.

- El acento antirrítmico: Este acento supone una ruptura en el ritmo del verso, se sitúa inmediatamente anterior a un acento rítmico.

Vamos a ver algunos ejemplos:

en - vá -no_a - me - ná - zas -muér - te
1       2      3       4      5      6      7       8
Así pues, 7 es el acento axial de este verso, trocaico, que tiene además un acento rítmico en 5 y un acento extrarrítmico en 2.

se - vuél - va, - mas - tú - y_é - llo - jún - ta - mén - te
1      2       3      4        5      6       7     8    9    10    11
Aquí tenemos en verso yámbico con acento axial en 10, tres acentos rítmicos en 2, 6 y 8 y un acento antirrítmico justo antes de 6, el 5. Aprovecho este verso para recordar que en español, los adverbios en "-mente" tienen dos sílabas tónicas, "men" y conservan la tónica de la palabra de la que derivan (en este caso, "jun").

Jugando con la distribución de los acentos versales tenemos una serie de paradigmas de versos de diferentes metros, vamos a verlo:

- El pentasílabo adónico: sus acentos rítmicos recaen en 1 y 4:
 mi recuerdo

- El endecasílabo enfático: sus acentos rítmicos recaen en 1, 6 y 10:
mientras el corazón y la cabeza

- El endecasílabo heroico: con acentos rítmicos en 2, 6 y 10:
después de tanta furia y tanta pena

- El endecasílabo melódico: con acentos rítmicos en 3, 6 y 10:
no era gloria del sol; mas parea

- El endecasílabo sáfico: con acentos rítmicos en en 4, 8 y 10
dulce vecino de la verde selva
Con su variante, el sáfico francés, que tiene sus acentos en 4, 6 y 10:
la primavera verde todaa

- El endecasílabo de gaita gallega, con acentos en 1, 4, 7 y 10 (este me gusta especialmente, está muy vivo):
Pues otra vez de la bárbara guerra

Como último punto, en la entrada anterior sobre ritmo puse de ejemplo un verso de Rubén Darío, el siguiente: 
Ínclitas razas ubérrimas, sangre de Hispania fecunda
Como veis, es un verso de arte mayor y que podemos (debemos) dividir en dos partes, hemistiquios: "ínclitas razas ubérrimas/sangre de Hispania fecunda". En este tipo de versos analizamos cada hemistiquio por separado, métrica y rítmicamente. En este caso, tenemos dos hemistiquios octosílabos (el primero tiene nueve sílabas gramaticales pero le restamos una sílaba métrica ya que acaba en palabra proparoxítona) con idéntico esquema rítmico (1, 4 y 7). Se denomina cesura a la pausa que hay entre los hemistiquios.

*Las razones enumeradas es la conocida ley de Mussafia.

Y en fin, creo que con esto podemos finalizar las nociones sobre el ritmo y los acentos de un verso. 

The Fall

Estas palabras mías

se van escurriendo

como las gotas

de un cristal

empañado

bajo la

lluvia

fría


ellas

huyen

igual que

se escapa de

mis manos vacías 

una vida mía e inútil

cuando tú no estás aquí

para ayudarme a sujetarla.

7 de febrero de 2011

Métrica: el ritmo.

Bueno, me decido por fin a escribir una nueva entrada, hoy, dedicada a un poco de teoría sobre métrica. Desde que leí Métrica española, un manual completo y fácil de leer y entender de Antonio Quilis, me rondaba en la cabeza hacer una entrada de este estilo (y también una serie de prácticas compositivas, pero eso es otra historia), y hoy, de una vez por todas, he sacado un poco de tiempo y ganas.

El tema que voy a tratar es el ritmo de intensidad (acento) en la métrica española. Este ritmo procede y toma su terminología del ritmo de la poesía grecolatina, que no era de intensidad sino de cantidad. Vamos a dedicarle unas líneas a esta diferencia.

La poesía grecolatina construye sus versos según la cantidad que tengan sus sílabas, que pueden ser breves o largas*. En cambio, en la lengua española no hacemos diferenciación entre sílabas largas o breves, así que obviamente, no parece demasiado productivo basar el ritmo de nuestros versos en algo que no existe en nuestra lengua. Este ritmo según cantidad grecolatino se "tradujo" en un ritmo de intensidad, es decir, un ritmo en el que se la da prioridad al acento fónico de las sílabas y no a su cantidad.

Otros conceptos que sería adecuado introducir antes de enumerar los diferentes ritmos versales y los acentos de intensidad que nos encontramos en la métrica española son los de tónico, átono, grupo acentual y palabras tónicas y átonas. Mucho de esto se supone que forma parte de la educación básica de un alumno de la E.S.O., pero más vale prevenir que curar.

Tónico y átono son sencillamente, acentuado y no acentuado respectivamente. Lo entendemos, por ejemplo, en cuanto a sílabas, palabras, etc. Por ejemplo, en la palabra "bolígrafo", todas sus sílabas "bo-lí-gra-fo" son átonas, a excepción de "lí", que es tónica. 
El grupo acentual es un grupo de tres a cinco sílabas subordinadas a un acento principal. Con esto entran las ideas de palabras tónicas y palabras átonas. Las palabras tónicas son aquellas clases de palabras cuyo acento va a imponerse, estas son sustantivos, adjetivos, verbos, adverbios, pronombres tónicos, indefinidos, posesivos demostrativos y numerales. Las palabras átonas, en cambio, son aquellas que van a subordinar su acento a los acentos de las palabras que las acompañen, y estas son la gran mayoría de conjunciones y preposiciones, el artículo indeterminado, pronombres átonos y adjetivos posesivos a grandes rasgos, saltándome alguna clase y alguna que otra excepción que tampoco creo indispensables.

Sabiendo esto, veamos los pies métricos de nuestra poesía, es decir, los diferentes tipos de ritmo acentual: yámbico y trocaico, los más comunes, y dáctilo, anfíbraco y anapesto.

- Yámbico: su esquema es _ /, es decir, la intensidad del primer grupo acentual del verso cae sobre la segunda sílaba métrica. en métrica grecolatina se corresponde con el esquema u_, sílaba breve seguida de sílaba larga.

la-lúz,|las-vé-gas,|el-már|O-ce-á-no**

- Trocaico: su esquema es _, la intensidad del primer grupo acentual del verso cae sobre la primera sílaba métrica, su correspondiente grecolatino es _u.

ím-pio|so-ña-dór|del-ó-ro***

Estos dos pies, los más comunes, son más fácilmente reconocibles del siguiente modo: teniendo en cuenta que el ritmo yámbico lleva su acento versal en sílaba par (segunda posición) y el trocaico en sílaba impar (primera posición), podemos conocer el ritmo del verso atendiendo al lugar que ocupa su última sílaba tónica (que en métrica española, por unas cuestiones que quizá trate algún día, suele ser en la penúltima sílaba, tendencia al paroxitonismo), de modo que si es una sílaba par, estamos ante un verso de ritmo yámbico, y si es sílaba impar estamos ante un verso trocaico.

- Dáctilo: su esquema es / _ _, la intensidad del grupo acentual se sitúa dos puestos antes de terminar el grupo, correspondiente en poesía grecolatina a _uu.

ín-cli-tas|rá-zas|u-bé-rri-mas****

- Anfíbraco: su esquema es _ / _, correspondiente al grecolatino u_u.

ves-tír-me|de-vi-vír

- Anapesto: su esquema es _ _ /, correspondiente al grecolatino uu_.

ya-quea-sí|me-mi-ráis,|mi-rád-me|al-mé-nos

Como se me hace un poco tarde, dejo para una segunda entrada el tema de los acentos versales y algunos tipos especiales de versos según la colocación del acento. Espero que os haya servido o al menos haya despertado vuestra curiosidad sobre un tema un tanto abandonado de la métrica española.

*La idea de mora, que ya comenté en algún otro post, es, como cabe esperar, fundamental en este tema de la cantidad silábica en griego clásico y latín.
**Acentúo las sílabas tónicas de cada grupo acentual (separados por barras | ), destaco que "Oceano"no lleva acento gráfico en la "e" en este verso, así que convertimos esta palabra proparoxítona en paroxítona, acentuada en "a".
***De nuevo la acentuación cambiada por el autor, en lugar de "impío" encontramos "ímpio".
****..sangre de Hispania fecunda, es el primer hemistiquio de este verso de Rubén Darío. No lo puse como ejemplo entero para no liarnos con cesuras y pausas versales.

P.D.: hace ya unos cuantos días me dediqué a justificar el texto de todos los posts del blog, ¡cuánto más bonito y ordenado está ahora!